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No menosprecio lo pasado, para nada, en lo más mínimo, pero ahora la novillada, segunda de la temporada y primera tercia del ciclo, es otra cosa. Tan lo es así que de tener un fuerte triunfo el español Roberto Galán, no es para nada descabellado en concebir en una pronta alternativa, al contrario, se que en su mente no hay espacio para otros pensamientos y estos son muy correctos y justos, tiene la suficiente madurez para aspirar a ella. Por cierto que esta columna le invitó a platicar sobre su carrera desde la tarde del domingo 26 de octubre pasado, en la misma puerta de la plaza México, y como buen extranjero cree que correremos en su búsqueda. En Estados Unidos dicen, “sorry”, en su tierra y en la nuestra eso quiere decir… “lo siento”… Sus alternantes, mas jóvenes en todos los aspectos, van por todo, máxime que Adame aprovecha la oportunidad para despedirse de los aficionados puesto que partirá a España a pocas horas después de salir de este compromiso. Labastida, con toda seguridad esta en espera y preparándose para la temporada chica de la plaza México, que no debe de tardar una vez que termine, el día ocho, la temporada grande. Esto, desde luego estará sujeto a ciertos caprichosos de un personaje que es muy incierto y que no es muy amante de proporcionar largas fechas a los novilleros… a no ser que Ponce renunciara a la alternativa, desde luego… Hablando de españoles. Al parecer son varios novilleros con esa nacionalidad los que veremos en la plaza “chiquita” de esta ciudad, la “San Marcos, en la misma entidad que tanto presume en tener caras escuelas, academias y casi universidades en tauromaquia. Aclaro, para no meterme en dos pleitos, la empresa no tiene incumbencia en las instituciones, es libre, autónoma y soberana… Me decía Alain de Mora, quien a base de mucho valor cortara un apéndice en la pasada tarde… -“Ya mostré que quiero ser torero, que no me cuarteo en la cara del toro, ¿ahora donde y cuando podré torear?. Solo me queda esperar e ilusionarme, voy a Acapulco mañana primero de marzo, Vallarta ni soñarlo, no tengo dinero para arreglar la ropa de torear que me deshizo “Truena Dedos”, menos para pagar me incluyan en una novillada”.-… De cosas muy distantes a lo anterior… Por hoy prefiero despedirme, perdón, estoy dolido de cómo tratan esos “socialitos políticos-taurinos” a la verdadera afición taurina, a aquellos que no traemos “la navaja de barbero” en la mano, prefiero que me llamen como cabrón y majadero, a hipócrita y vendido… Lo peor es que todo mundo sabe a que y quienes me refiero… y ellos como los caballos de los picadores, con “los ojos vendados”… Lo que hay que hacer para comer… ¡RASTREROS!... Nos Vemos.